Día: 15-04-2016.
Lugar: Oviedo.
Comentario:
Tengo que reconocer que
nunca he tenido por costumbre reflexionar en algún post en este blog y en el
anterior........................................................................................................................................
sobre la manera de
afrontar y de preparar futuras carreras (en este caso la Media Maratón de
Oviedo de este Domingo 17 de Abril), compaginando otras muchas cosas que nos
pueden gustar a lo largo de la vida y de hasta qué punto estamos dispuestos las
personas a renunciar a unas u otras actividades a cambio de unos breves
momentos de felicidad sea en la actividad que sea, por así decirlo.
En parte, el génesis de
este post viene dado por el intercambio de opiniones o por la interpretación, más
allá de las mismas, de las diferentes formas que tenemos los corredores de
intentar alcanzar un objetivo a costa de privarnos de otras muchas cosas que
nos puedan gustar en un momento dado y de si al final, dichas privaciones
“compensan con creces” el resultado final de cualquier prueba deportiva y en
este caso concreto en el de las tan de moda “carreras populares”.
En mi caso, he
afrontado todas las diversas actividades deportivas que he podido realizar a lo
largo de todo estos años, como lo que son, de ocio y nada más, para disfrutar
en solitario o en compañía, realizándolas cuando me diera la gana y cuando no,
pasando de ellas.
Con esta mentalidad anárquica
han transcurrido estas últimas cuatro décadas y media, esperando que todavía
puedan pasar algunas más y pudiendo seguir realizando lo que quizás sea lo que
más me guste en el tema del ocio, pero sin privarme de otras muchas cosas que
nos ofrece la vida y que merecen muy mucho la pena.
¿Por qué renunciar a
una buena comida cuando a uno le apetece, por bajar un tiempo determinado en
una carrera?...
Quizás sea esta la pregunta que me ha llevado a escribir este
post dado los cuidados alimenticios y de otros tipos que puedan realizar los
corredores que quieren conseguir determinados objetivos y que se privan de
muchas cosas con tal de conseguir esas marcas deseadas que tanto anhelan, unas
más realistas y otras quizás no tanto, pero al final son solo eso marcas,
tiempos, cronos o números en un marcador que a muchos les pueden hacerse
sentirse “realizados” en cualquier disciplina deportiva, como por ejplo la del
“running” y en muchos casos olvidando dichas personas lo que es, en mi
opinión, lo más importante en la vida, disfrutar con lo que uno haga en cada
momento y sobre todo a raíz de que uno va cumpliendo años en el calendario.
Viene esto a colación y
en este día en concreto, porque a falta de algo menos de 48 h para que
participe en la Media Maratón de Oviedo, hoy tenía dudas sobre si “comer bien”
o pasar de ello e irme a comer por fuera a una parrilla y comer de restaurante
y pillar de paso un par de "kilillos" a falta tan solo de un par de días para la
carrera y a costa de meter en el cuerpo grasa, calorías a través de la comida y calorías también de esas que
se llaman "vacías" a través del alcohol.
La verdad, sí que me
apetecía muy mucho irme a comer unas costillas, así que no lo dudé y a las 15h,
tras salir del curro, iba a pillar el coche y poner rumbo hacia la parrilla en
cuestión y así disfrutar de una buena comida en este Viernes y con el objetivo
de disfrutar también el próximo Domingo durante la carrera, independiente del
tiempo que pueda realizar en la misma.
Después del tiempo
conseguido en la Media Maratón de León (01h43:36) y tras haber bajado casi 7
minutos mi mejor marca del año pasado, he confirmado lo que en mi caso ya
sabía, no me merece la pena renunciar a muchas cosas por bajar segundos o
minutos al crono.
Lo importante es
disfrutar con este tipo de actividades (lo tengo clarísimo) y sobre todo el
poder seguir realizándolas con el paso del tiempo es un lujo a medida que las
hojas en el calendario se van quitando, hecho que desgraciadamente mucha gente
no entiende hasta que les falta la oportunidad de poder seguir practicándolas.
Pero bueno, allá cada
uno….
En cuanto a la comida
de este día, pues poco qué decir y reflejar la estricta dieta alimenticia que
me puso el nutricionista que llevo dentro a falta de un par de días para la
celebración de una Media.
El lacón a la parrilla…
Las costillas que no
falten…
El postre, flan que
venía en una copa (la primera vez que lo veo presentar así)…
El café y el chupito de
avellana para acabar…
Está claro que viendo
todo lo anterior, no es la comida propicia, pero propicio fue el disfrute que a
partir de las 15h45 tuve en este día en el mantel, así que como se suele decir.... ¡Qué me quiten lo bailao!...
Cambiando de tercio y
sobre la Media de Oviedo, decir que no llego en unas condiciones óptimas para
mejorar o por lo menos intentar mejorar la marca de León.
El recorrido no es
propicio, la cabeza me pide no correr muy rápido y guardar fuerzas para Gijón,
el peso va a más (tras la comida debo estar ya en unos 79 Kg, cuando a León
había llegado en 75,7) y encima falta el día de engorde de hidratos de mañana
por lo que supongo que llegaré a primera hora del Domingo con un peso en torno
a los 80.
No pasa nada, a
disfrutar como he dicho anteriormente y a ver cómo me encuentro durante la
carrera.
¿Objetivos de
crono…?...Ni idea ya que soy una incógnita incluso para mí mismo…
He realizado un par de
buenas tiradas largas este par de semanas, combinándolas con alguna salida
“chula” de montaña, pero la verdad sí que en Gijón estaré listo para intentar
bajar de ese tiempo de 01h43:36 y sino, pues nada, habrás más oportunidades y
si éstas no llegan, pues no pasa nada tampoco, a seguir activo corriendo y
manteniéndome en forma y sobre todo….¡La Montaña que no me falte…!, así que en
día y medio ya se sabrá lo que habrá pasado en esta mi segunda participación en
la Media de mi ciudad.
Suerte y a por 1h:48, a ver si sale¡¡.
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