Día: 20-04-2016.
Lugar: El Molinón.
Resultado: Sporting 2 –
Sevilla 1.
Comentario:
Partidazo el que se
vivió este Miercoles pasado en El Molinón y con remontada final del Sporting ya
que el Sevilla se había adelantado al comienzo del partido, concretamente en el
minuto 8.
Jugó muy bien el
Sporting, mostrando en todo momento una actitud diferente a otros partidos en
casa de infausto recuerdo.
Al final, el estadio
estallaría en júbilo al ver como Isma López, en tiempo de descuento, desviaba a
la red un balón disparado por Rachid desde la frontal.
Decir que el Sevilla
tuvo también sus ocasiones, la más clara de Llorente, pero que Cuellar al final
pudo desviar con la mano.
Tres puntos de oro que
dan esperanzas para los últimos cuatro partidos, aunque mejor dicho, quedan tres
partidos en realidad ya que la próxima visita que tendrá que realizar el equipo
rojiblanco es al Camp Nou, así que como ese partido no contará nada para el
tramo final ya que se espera derrota.
Crónica del marca sobre
este partido…
Subidón,
en su primera y única acepción: "Elevación rápida y fuerte que experimenta
algo". Así lo define la Real Academia Española. Referido al Sporting,
traducido al lenguaje del fútbol y extrapolado a lo que se vivió ayer en El
Molinón, sería una explosión de alegría, de júbilo, un cambio de dinámica y una
inyección de ánimo. En lenguaje coloquial, un subidón de moral.
Victoria
balsámica, salvadora y cualquier otro adjetivo similar con el que se la quiera
adornar de los asturianos ante el Sevilla, triunfo que les permite seguir
soñando con ese "milagro" llamado permanencia. Ojo, que no lo dice el
cronista, que lo aseguró Abelardo en la previa del encuentro. Obra divina o
realidad, el caso es que el Sporting está un paso más cerca de la permanencia.
Aún queda mucho por remar, pero la orilla se vislumbra con más nitidez.
Isma
López se vistió de héroe. Lucía la camiseta rojiblanca, pero bien podía haber
llevado una capa al estilo Superman. Su figura surgió gigante en el área del
Sevilla para desviar, con un pie mágico para el sportinguismo, un disparo de
Rachid desde la frontal. Rico que iba para un lado, se encontró con que el
balón se colaba en la portería manso por el costado contrario. Gol. 2-1 Subidón
en El Molinón. Era fuera de juego, pero eso a la afición le da igual. Subió al
marcador. Y es lo que cuenta.
Coraje y corazón
Antes
tocó sufrir. Iborra metió el miedo en el cuerpo al Sporting. El valenciano
marcó de volea tras un pase de Llorente con el exterior. Tocó Sergio Álvarez
con la cabeza, pero no lo suficiente para despejar el balón. Nubarrones oscuros,
más de los que había, que diluviaba en Gijón, aparecieron por el horizonte.
Apenas se había llegado al minuto 10 y el encuentro ya estaba cuesta arriba.
Los
rojiblancos se sobrepusieron. Coraje y amor propio para, lejos de venirse
abajo, sacar fuerza mental de donde no la hay y embotellar al Sevilla. Jony era
el líder. Tiene carácter para echarse al equipo a la espalda y calidad de sobra
para desbordar y ser el jugador más peligroso. Había avisado con un par de
arrancadas. Hasta que le llegó un buen pase de Halilovic y su disparo acabó en
la red. Con la inestimable colaboración de Krychowiak, eso sí, que, en su
intento de despeje, desvió lo suficiente para despistar a Rico. Gol en propia
puerta del polaco. Contento, por cierto, tiene que estar Emery con la pérdida
de balón de Ramí en tres cuartos de campos del Sporting, robo que originó la
contra de los asturianos. Eran cinco para tres. Una acción de manual para
empatar.
El
Sporting se la jugaba. Y, aunque lo pasó mal en segunda mitad -Llorente tuvo
una clarísima-, aguantó estoicamente el empuje del Sevilla hasta que apareció
Isma López y obró el milagro de El Molinón. Ese del que tanto hablaba Abelardo.
Alguna imagen…
El estadio.
Isma López nada más
marcar el segundo gol que daba la victoria al Sporting y celebrando el gol.
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