Día: 21-05-2017.
Desnivel: +150 m aprox.
Lontitud y tiempos: 12,14 Km en 03h39:11.
* Salinas – Sta María
del Mar ....... 06,10 Km - 01h59:11.
* “La Vuelta por el
Fondón ……... 06,04 Km – 01h40.
Comentario:
Después del palizón del
día anterior por tierras del Concejo de Caso realizando la ruta circular al
Lago Ubales, este día la mente y sobre todo el cuerpo me pedía una ruta
muchísimo más liviana de esas que denomino de “descanso activo”, así que como
tenía pendiente de realizar durante este año y en una escapada “express” para
el verano esta ruta de la senda costera de Salinas a Sta Maria del mar, me dije
que igual era buena ocasión para quitarla de “la libreta de las pendientes” en esta día por lo que tras levantarme este Domingo bastante más tarde de lo habitual, me
acercaría a Salinas empezando a caminar a eso de las 13h aproximadamente en una
ruta que se presumía de que iba a ser más un paseo tranquilo que otra cosa, tal
como me resultaría al final la misma.
Tras aparcar el coche
en una de las calles de esta localidad turística de Salinas, empezaría a caminar
hacia la zona de la costa, llegando al inicio de la ruta de este día, inicio
señalado por una joya del patrimonio minero e industrial, la locomotora de
vapor “Rojillín”, nombre que le viene dado por el color que le proporcionó el zinc
mientras estuvo de servicio y habiendo sido fabricada en Alemania en el año
1925.
La dirección estaba
clara, así que tras salir el paseo de la playa ya vislumbraría mi siguiente
destino en la península de La Peñona, el Museo de Anclas de Philippe Cousteau.
Hacía atrás, la playa
de Salinas y sus características torretas de apartamentos turísticos.
Me desviaría unos
metros hacia dicha península para dar una vuelta por la misma y para ver
descubrir la Playa del Cuerno, pedrero situado en esta zona.
En esta zona, El
mirador de La Peñona y por delante de la misma, la roca en donde está ubicado
el Busto homenaje a Philippe Cousteau.
Parte de este museo de
las anclas y por encima del mismo la zona del área recreativa y por la que
regresaría al coche unas tres horas después.
Un antes y un después
del Mirador de la Peñona y su puente colgante.
El busto homenaje a
Philippe Cousteau, hijo del inolvidable y del gran Jacques-Yves Cousteau.
Las Playa de Salinas
desde el mirador, playa con una longitud total de unos 2.100 m aproximadamente y
que está unida a la vecina Playa de San Juan de Nieva, playa con otros 500 m de
propina y que entre ambas configuran lo que se conoce como la Playa del
Espartal.
Abandonaría entonces la
pequeña península para ir caminando en dirección a las instalaciones de la
empresa de Asturiana del Zinc y antes de atravesar el túnel que separaba dichas
instalaciones con toda la zona de Salinas, aprovecharía para sacar una última
imagen del pedrero del Cuerno.
Nada más atravesar este
túnel me desviaría a la drcha para elevarme por un tramo de peldaños hechos en
el terreno y luego a través de un posterior sendero para obtener imágenes un
tanto diferentes de toda la zona del museo y con la playa y población de
Salinas por detrás del mismo.
Instalaciones de
Asturiana del Zinc.
Iría por un tramo de
unos centenares de metros en dirección a la entrada de dichas instalaciones y
tras pasar las mismas iba a pillar un sendero a la drcha que ya me iría
llevando pegado a las caídas hacia el mar.
Hacia atrás en mi
avance, las instalaciones que acabo de comentar.
Para salir de esta zona
iba a tener que avanzar por encima de un muro de unos 200 m de longitud ya que
el sendero iba a estar totalmente cubierto por matorral.
Mientras tanto en mi
avance, me iba aparecer otra de las playas del día, la Playa de Arnao, playa de
unos 350 m de longitud.
Un par de imágenes de
dicha playa.
Saldría entonces a un
guapo paseo que me llevaría al Museo de la Mina de Arnao, constituyendo dicha
mina uno de los conjuntos de patrimonio minero más emblemáticos de España, ya
que aparte de situarse en un paisaje costero, constituye la explotación de
carbón mineral más antigua de la Península Ibérica, el pozo vertical más
antiguo de Asturias y la única mina submarina de Europa.
Fue cerrada la mina en
1915 y sus galerías subterráneas tienen cerca de 200 años, pudiéndose en la
actualidad visitar, así que habrá que aprovechar para acercarse otro día a
conocer el lugar.
La ruta continuaba por
detrás del museo para recuperar en fuerte ascenso a través de unos peldaños y
luego por tramo asfaltado, la senda costera objetivo del día.
En mi avance iba a
obtener uno de los descubrimientos del día, un islote llamado “Isla Ladrona” y que
fijándome bien para el susodicho, me recordaba la imagen de un macaco arrodillado.
Como anécdota sobre
dicha isla decir que la misma está rodeada de una oscura leyenda, según la cual
se le puso popularmente este nombre porque allí solían aparecer cadáveres de
ahogados.
Su mito fue creciendo
con el tiempo hasta que se llegó a afirma que había una fosa con un calamar
gigante que atrapaba a la gente, aunque la realidad era bien distinta ya que
eran las corrientes las que arrastraban hasta allí los cuerpos de las personas
ahogadas.
Una última
puntualización sobre dicha isla es que la misma es accesible en la bajamar desde
tierra.
“El macaco” o “Isla
Ladrona” me iba a ir cambiando de aspecto según avanzaba hacia Sta María del
Mar.
Tras el ascenso anterior
me iba a tocar perder metros hacia las dos playas de Sta María del Mar.
La primera de ellas.
Segunda playa de esta
localidad asturiana de Sta María del Mar (467 hab en el 2009), a la que
llegaría tras recorrer 06h10 Km en 01h59:11.
Daría entonces media
vuelta para ir volviendo sobre mis pasos hacia las instalaciones de Asturiana
de Zinc, pasando de nuevo, esta vez en descenso por la zona de la Playa de
Arnao y viendo al frente la zona del área recreativa que me iba a permitir
obtener extraordinarias vistas de la Playa de Salinas.
Pues llegaría a dicho
enclave industrial para irme unos metros en dirección a Piedras Blancas y
localizar así el desvío (junto a la casa roja) del tramo asfaltado primero y
luego del tramo de ancha senda que me iba a permitir ascender hasta el guapo
lugar de esparcimiento del Concejo de Castrillón.
Una pequeña parte de
dicha área recreativa.
Desde dicho lugar ya
conocía las vistas que iba a poder disfrutar del entorno de Salinas ya que el
año pasado me había dejado caer por el área, pero aunque las vistas eran
conocidas, seguían siendo igual de espectaculares que la primera vez.
La Concha del Espartal
y el Museo de Anclas de Philippe Costeau desde las alturas.
Desde el mismo área salía
un tramo de sendero que luego se transformaría en una senda más ancha y que me
iba a ir llevando en descenso hasta Salinas, saliendo al paseo de la playa en
el mismo lugar en el que había sacado la primera imagen del día de la
locomotora del “Rojillín”.
Un par de imágenes de
este tramo e imagen hacía atrás del punto final de la excursión de esta
jornada.
Como datos numéricos
decir que a la vuelta haría otros 06,04 Km para tardar otras 02h06:27 en llegar
al coche, realizando al final del día una ruta con un kilometraje total de 12,14
Km que me llevaría unas 03h39:11 en realizarla.
Resumiendo, excursión
fácil y apta para “todos los públicos” y la cual me ayudaría para hacer algo
fácil después de la ruta del día anterior.