Itinerario reflejado en este post: Carrión de los Condes.
Fecha: 06-08-2020.
Comentario:
Enlace con la primera
parte del día...
Como dije al final del
post anterior, tras cruzar el puente y ver alguno de los objetivos para la
segunda parte de la tarde, iría subiendo por los peldaños hasta dar con alguna
de las calles de esta parte del pueblo de Carrión de los Condes.
A los pocos centenares
de metros, me encontraría con la Plaza de S. Andrés y con el monumental templo
adyacente a dicha plaza conocida como “La Catedral de Carrión de los Condes”,
construida en el siglo XVI.
Como es lógico, no
podría evitar la tentación de conocerla por dentro.
Me gustaría dicha
iglesia así que tras salir del templo, me iría a la zona en donde había visto
una llamativa iglesia en el momento de cruzar el puente al final del post
anterior.
En el trayecto hacia
dicha iglesia, me encontraría con la Ermita de Sta Vera Cruz.
Y también con el centro
de Religiosas Filipenses del pueblo.
Finalmente y tras unas
pocas decenas de metros daría ya con la fachada de este monumento tan importante
de Carrión de los Condes como es el de la Iglesia de Nuestra Señora de Belén,
templo de culto católico construido en los siglos XVI y XVII.
Interior de la misma.
La iglesia vista desde
el mirador situado a pocos metros de la misma.
Iría entonces caminando
hacia la Plaza Mayor, encontrándome alguna de las calles con buen ambiente pero
tengo que decir que en general en el pueblo no encontraría el ambiente que me
había imaginado inicialmente por ser uno de los pueblos protagonistas del
Camino de Santiago.
Detalle entre dos
fachadas que me encontraría en este trayecto.
La entrada al Museo de
Arte Contemporáneo visto desde el Callejón de Santiago.
Plaza Mayor y el
Ayuntamiento.
Iglesia de Santiago
vista desde la Plaza Mayor.
De la plaza tomaría la
C/Sta María para poner rumbo a otro de los monumentos importantes de la
localidad, el Real Monasterio de Sta Clara. Antes de llegar a dicho monasterio,
me encontraría con la Iglesia de Sta María del Camino y en la que me detendría
algún minuto a la vuelta de la visita a Sta Clara.
Tras caminar cerca de
300 m ya me daría con el Monasterio de Sta Clara, fundado en 1231 y en el que
habitan las Hermanas Clarisas.
Me encontraría entonces
con la zona del Monasterio destinada a albergue para los peregrinos y que se
encontraba abierta así que me internaría algunos metros para ver el buen
ambiente que había oído desde la calle.
Entrada al monasterio.
Seguiría caminando por
el asfalto hasta casi el final del pueblo por esta vertiente Oeste en la que me
encontraba, encontrándome en esta parte el primer edificio con el que se
encuentran los peregrinos a la llegada al pueblo, la Ermita de la Piedad del
siglo XVII.
Trío de imágenes de
dicho edificio religioso.
Panel situado junto a
dicha ermita.
El Pantocrator situado
en la parte posterior de la ermita.
En esta parte del
pueblo quedaba un edificio similar al de otros pueblos de Castilla y que
siempre me han llamado la atención aunque sigo sin comprender el porqué así que
aprovechando que lo tenía delante no pude contenerme las ganas de
inmortalizarlo para el reportaje de las vacaciones.
Otra de las imágenes de
siempre asociada a mis retinas en mis viajes a Castilla – León ha sido siempre
la del amarillo de sus campos en periodo estival, así que teniéndolas delante
no iba a perder la oportunidad de tenerlas en el álbum del viaje de estas
vacaciones.
Tras estar a las
afueras del pueblo, retornaría a la Playa Mayor para ya tomar algo y picotear
algo si era posible. En dicho retorno me detendría a la altura de la Iglesia de
Sta María del Camino.
El sol ya se estaba
poniendo así que en esos últimos minutos del día aprovecharía todavía para
sacar las últimas imágenes como por ejplo la del Teatro Sarabia y la de la Casa
de Cultura del pueblo.
Últimos minutos de luz
en la Playa Mayor.
Me encontraría a estas
horas con muy buen ambiente en las dos terrazas de la plaza así que
aprovecharía para conocer la terraza en la que no había estado algunas horas
antes y en la que tomaría una cerveza e intentaría picar algo, no pudiendo
conseguir esto último ya que el servicio dejaría mucho que desear en esta tarde
– noche (y luego algunos establecimientos se quejan cuando van a pique...).
Última imagen sacada
del día en dicha terraza en la que se puede apreciar el buen ambiente
reinante.
Renunciaría al final a
cenar algo ya que al mediodía había comido bien así que me iría directo al
hostal para descansar de cara al día siguiente, no pudiendo conseguirlo ya que la
cama me resultaría más que incómoda durante toda la jornada nocturna.
Con esta última
apreciación finalizo el resumen de lo que daría de sí este primer día de mi
viaje a Valencia así como se suele decir...
¡A descansar
tocaba...!.
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