Día: 15-08-2019.
Desnivel: +575 m.
Picos subidos: Ninguno.
Longitud: 12,67 Km.
Tiempo: 03h:26:45
Comentario:
En este día me iría de
nuevo a Villamanín para realizar una ruta que en un principio no tenía programa
y que me iba a llevar a la Collada de Formigoso (1.659 m) y que no había subido nunca por
esta parte y aunque la ruta no era nada atractiva en un principio, acabaría por
hacerla más que nada por seguir saliendo de montaña pero sin demasiadas ganas.
Aparcaría en el
aparcamiento del “Ezequiel” y para pasar al otro lado de las vías del tren.
Estación de tren de
Villamanín.
Tocaba transitar por la
calle principal del pueblo en dirección sur hasta encontrarme con la pista que
tendría que tomar y que me iría elevando de una forma bastante llevadera.
Echando la vista hacia
atrás y en donde se podía ver el pueblo que poco a poco se iba alejando y a lo
lejos, el Brañacaballo (2.182 m).
Hacia adelante y la
carretera nacional por debajo.
Villamanín.
Nave que me encontraría
durante la primera parte de la ascensión.
La pista en esta
primera parte se me iba a presentar bastante cómoda, tanto por el piso como por
la pendiente de la misma, así que iría caminando en busca del desvío que ya
conocía por una ruta que había hecho años atrás y que en aquella ocasión, el
itinerario, me había obligado a torcer a la izda. Esta vez, seguiría a la
drcha, en busca del collado objetivo de este día.
Tras el desvío, la
pista iba a empezar a perder metros durante algo más de 05 min hasta
encontrarme con una valla de madera que traspasaría para encontrarme con una
especie de almacén y una especie de garita cerrada en cuyo interior el sonido
era como el de una cisterna.
Vista hacia atrás a las
antenas a las cuales había llegado años atrás y que este día obviaría.
Hacia atrás, cercado de
bloques de hormigón que me encontraría al paso.
La pendiente a raíz de
encontrarme con el vallado de madera, se había incrementado de forma
sobresaliente, así que no tuve más remedio que ralentizar el ritmo que llevaba,
fruto de la pendiente y de que en este día no me encontraría muy fino con las
sensaciones.
Panorámica hacia atrás.
Tramo final cercano a
la Collada de Formigoso (1.659 m).
Una vez en la collada,
la vistas se me abrirían mostrándome una zona de pastos en las cuales había
ganado vacuno y caballar.
Aquí iría en busca de
una pista que se encontraba en la vertiente norte del cordal que tenía por
encima, así que iría caminando en sentido descendente hasta encontrarme con un
paso en el que se encontraban abundantes piornos, no localizando la pista que
buscaba, así que iría de vuelta a la collada para iniciar el descenso hacia el
coche ya que en este día no me estaba encontrando cómodo a la hora de caminar.
De vuelta a la collada
para iniciar el descenso.
La vuelta se me haría
un poco larga, así que cuando finalicé los algo más de 12 Km de este día, puedo
decir que me sentiría bastante aliviado ya que no había estado en ningún
momento de la ruta de este día.
¡Ruta que para nada
tendrá un lugar significativo en las de este año…!.
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